Una enseñanza memorable de un Grande que acaba de partir

Acabo de enterarme que terminó su peregrinar terreno el Papa emérito Benedicto XVI. El común sentir del pueblo católico es que ha muerto en olor de santidad y, si bien no estoy en condiciones de hacer un panegírico de su vida, no quería dejar pasar la oportunidad sin recordar una de sus enseñanzas que más me ha gustado y, por tanto, más me ha servido. Habla de una de las virtudes que más se han reflejado en su vida: la humildad. Para nosotros, pecadores arrepentidos, es un gran consuelo leer este comentario del Evangelio, y cuanto más al comenzar un…