Al desierto…
Al límite del horario escribo a mano alzada este post en orden a “despedirme” por un mes del ciberespacio, para internarme en ese “milagro” del que hablábamos casi un año atrás[1]: los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola. Estaremos en esta palestra 8 sacerdotes, 19 novicios y 1 laico (¡como para que nos encomienden!). Hacer Ejercicios es como ir al desierto… El llamado a este inhóspito sitio resuena a lo largo de la historia de la salvación. En el desierto Israel encontró por primera vez a Dios, allí fue Moisés conduciendo sus rebaños, y en una zarza ardiente se…